"Una gran democracia debe progresar o pronto dejará de ser o grande o democracia.."

domingo, 16 de septiembre de 2012

Los lápices siguen escribiendo la historia

El 16 de septiembre de 1976 diez estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nro 3 de la Plata fueron secuestrados tras participar en una campaña por el boleto estudiantil. Tenían entre 14 y 17 años. El operativo fue realizado por el Batallón 601 del Servicio de Inteligencia del Ejercito y la Policía de la Provincia de Buenos Aires, dirigida en ese entonces por el general Ramón Camps, que calificó al suceso como lucha contra "el accionar subversivo en las escuelas". Este hecho es recordado como "La noche de los lápices" Si bien como sociedad debemos tener memoria de de los hechos que nos tocaron vivir, para evitar que vuelvan a suceder, debemos también replantearnos varios aspectos de nuestra realidad. Nosotros desde nuestro lugar como jóvenes , en el mismo lugar en el que se encontraban aquellos chicos en esa época, tenemos la obligación de hacer algo para cambiar lo que hoy no nos gusta . Recae en nosotros un mandato generacional que debemos cumplir. Seria imprescindible preguntarnos ¿Qué le vamos a dejar a las generaciones próximas? Por decirlo de algún modo siguiendo el ejemplo de aquellos jóvenes que lucharon por sus ideales poniendo en juego incluso sus vidas en post de defenderlos. Creo que todos tenemos ideales pero lo que debemos tener también es la fuerza de empuje para ponerlos en práctica. La Argentina atraviesa hoy dificultades varias, la pobreza, la falta de educación de calidad, el no acceso a la salud para todos, la violación de las libertades individuales, la inseguridad, la falta de formación cultural y ciudadana, pero a pesar de ello tiene un gran capital humano que debe ponerse en marcha para lograr el cambio o al menos alguna mejora en estos aspectos. Somos notros los que impulsamos ese cambio y solo de nosotros depende que el resto de la gente se sume al cambio, que se involucre. Hagamos valer nuestros derechos pero asumamos también las responsabilidades que nos competen.

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